1.
si me observas descubrirás que no duermo
que solo sostengo una cigarra ante mis ojos
como si la savia y vos fuesen idénticas
y es que puedo ignorar la juntura de los átomos
su connivencia
para hacer y deshacer lo que investigo
con ese afán de aprender que nunca pierdo
esto es
miro a través de tus secretos
ardo tu sombra y la ilumino
y nada de vos deja de hacerme
ni aún cuando en un ¡zás!
si me observas descubrirás que no duermo
que solo sostengo una cigarra ante mis ojos
como si la savia y vos fuesen idénticas
y es que puedo ignorar la juntura de los átomos
su connivencia
para hacer y deshacer lo que investigo
con ese afán de aprender que nunca pierdo
esto es
miro a través de tus secretos
ardo tu sombra y la ilumino
y nada de vos deja de hacerme
ni aún cuando en un ¡zás!
(o un ¡pow! o un ¡guau! que son más rápidos)
determino los horarios de la siesta
2.
cruzar límites no pertenece a ningún viaje
el secreto del viaje es permanecerse
es quedarse sin quedarse
dejar que absolutamente todo se nos quede
y avanzar con todo estando quieto
pero cruzar los límites es solo una locura
no es (puedo asegurártelo) la generación de lo espontáneo
ni la desrutina habitual
ni un escrutinio de futuro
es simplemente asirse de lo efímero
para fagocitar los estampidos
(una forma de escapar
en cierto modo
de todo aquello que nos dice que así somos
y me incluyo en la ecuación por las incógnitas)
3.
inhabitual quizás
como la muerte
solo una al igual que el nacimiento
¿por qué no también el amor aunque otra forma?
más difícil tal vez
pero evidente
como un espejo en lo más opaco de la tarde
descubierto por el grito de la imagen
por ser lo que se es aún siendo otro
4.
no necesitás abrir tu vestido
te entiendo igual
aún cuando el tiempo absorba el humo y las cigüeñas
porque no necesito un prendedor en la solapa
o un encendedor dorado encendiendo los cigarros
sino simplemente
saber que esperas
como una lengua esponjosa que me ansía
abandonada sobre el sillón con tanto arte
pero... sí
podés hacerlo
podés ordenar la fuga de los cierres
podés extenderte como un milpiés sobre mi pecho
y caminar mis costados como siempre
conduciendo mi deseo como nadie
(no tengo necesidad de nombrarte
ni de dibujar oscuridades de pizarra
así por entonces y siempre
determino los horarios de la siesta
2.
cruzar límites no pertenece a ningún viaje
el secreto del viaje es permanecerse
es quedarse sin quedarse
dejar que absolutamente todo se nos quede
y avanzar con todo estando quieto
pero cruzar los límites es solo una locura
no es (puedo asegurártelo) la generación de lo espontáneo
ni la desrutina habitual
ni un escrutinio de futuro
es simplemente asirse de lo efímero
para fagocitar los estampidos
(una forma de escapar
en cierto modo
de todo aquello que nos dice que así somos
y me incluyo en la ecuación por las incógnitas)
3.
inhabitual quizás
como la muerte
solo una al igual que el nacimiento
¿por qué no también el amor aunque otra forma?
más difícil tal vez
pero evidente
como un espejo en lo más opaco de la tarde
descubierto por el grito de la imagen
por ser lo que se es aún siendo otro
4.
no necesitás abrir tu vestido
te entiendo igual
aún cuando el tiempo absorba el humo y las cigüeñas
porque no necesito un prendedor en la solapa
o un encendedor dorado encendiendo los cigarros
sino simplemente
saber que esperas
como una lengua esponjosa que me ansía
abandonada sobre el sillón con tanto arte
pero... sí
podés hacerlo
podés ordenar la fuga de los cierres
podés extenderte como un milpiés sobre mi pecho
y caminar mis costados como siempre
conduciendo mi deseo como nadie
(no tengo necesidad de nombrarte
ni de dibujar oscuridades de pizarra
así por entonces y siempre
eternamente)
5.
sos tan natural en la belleza
sos la palabra belleza más precisa
con tu exacta dimensión de hacerlo todo
sensualmente hablando
por supuesto
quizás obvio
pero sin escrituras al margen
sin cambalaches de propósitos
una permanencia en el viaje y el recuerdo
que nos define como cazadores de nosotros
después la sombra y la luz y después todo
el entreacto habitual de los espacios
una copa cordial
y una sonrisa
5.
sos tan natural en la belleza
sos la palabra belleza más precisa
con tu exacta dimensión de hacerlo todo
sensualmente hablando
por supuesto
quizás obvio
pero sin escrituras al margen
sin cambalaches de propósitos
una permanencia en el viaje y el recuerdo
que nos define como cazadores de nosotros
después la sombra y la luz y después todo
el entreacto habitual de los espacios
una copa cordial
y una sonrisa
2 comentarios:
Sr. Sergio Rabadá, es notorio que lleva ya tiempo en este oficio de la poesía, y quiero expresar mi más completo agrado, lo hace muy bien. "Este viaje suyo denota permanencia y más aún, un deleite en la permanencia".
SAludos. (D. Rodríguez).
Como podrás leer en algunas de mis respuestas sí, disfruto escribir pero lo de que lo hago muy bien va por tu cuenta (estoy tratando de evitar me demanden por falsía... ejem).
Un abrazo y suerte.
Sergio
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