jueves, 3 de diciembre de 2009

de putas y doncellas

Imagen: Murbo

1.
dejar un pétalo blanco sobre la boca roja
de una doncella
que ya no es doncella
es
para algunos
la belleza

yo creo que son idiotas

siempre he creído que la belleza
no reside en prístinas doncellas que no saben
sino en las plenas putas que saben todo

y les aseguro

solo ellas podrán juzgarme

2.
era un vagón
de tren o subterráneo
eso no importa
era un vagón solo conmigo y ella
y ella estaba desnuda
ella estaba desnuda y dentro de mis ojos
ella hurgaba con sus dedos en mis neuronas
hurgaba con sus uñas entre ellas
buscando
quizás
que la mirase
y yo que no puedo evitar responder
una caricia
la miraba

pero al salir
fue tan extraño

ella se acomodó la gabardina/ levantó su bolso
y se fue sin dejarme una mirada

las mujeres hermosas tienen eso
uno
que es quien es
las desnuda
las sueña
y las recuerda
aunque ellas ni siquiera
y quizás nunca

3.
sigamos con el tren desenrollándose
como la lengua de un experto en inversiones
sigamos con la distancia
la clara gabardina de seis u ocho o diez botones
no importa
importa la imagen en mi mente
las heridas que la mujer dejó en ella
al desnudarse
heridas que por convención
es la memoria
el recuerdo
y el deseo
sigamos con el tren y la mujer y mi recuerdo
una mujer desnuda jamás desnuda
una mujer producto
únicamente
de mi ansia
una mujer con un vestido delicado
que debajo llevaba lo mismo que yo
en mis bolsillos
(nada, para los que se preguntan
mis bolsillos suelen ser un páramo
un desierto seco y árido
donde la vida
es una mano
que hurga y hurga sin esperanza)
sigamos con esa mujer y con sus ojos
hipnótica mujer de exuberante mirada
de boca roja como señal de látigo

sigamos con esa mujer jamás desnuda
que sin embargo
impresionó con su desnudo mi retina
mi cabeza
y mis recuerdos
sigamos con esa mujer que sin quererlo
hizo en mi nacer el ansia
irrefrenable
de tenerla

y acabemos
diciendo
que por eso me gustan las plenas putas
y no
las doncellas

pese a los pétalos blancos en sus bocas
o a su mirada inocente
clavándose en tus ojos
y preguntando
¿aún me amas?

2 comentarios:

Ikaraku dijo...

vaya poema!! simplemente genial... un abrazo Sergio.

D.Rodríguez

Sergio dijo...

Gracias distante amigo mío, y gracias por pasarte siempre por aquí.

Un abrazo.