jueves, 1 de abril de 2010

estadía


1.
estaba el río
y la ladera y el campo me parecían
construidos con colores asombrosos
y estaba yo y mi espalda
como siempre
contra un árbol
mirándome mirar en el reflejo
pensando a veces
hasta donde llevaría ese río a mi imagen
si llegaría tal vez hasta el océano
y sí desde allí
reflejada por la espalda de los peces
atravesaría el tiempo y te alcanzara
haciéndote saber que te quería
aún antes de saber que me buscabas

2.
te construí casi como un desafío
no quería creerte un imposible

una imagen recurrente en la avenida
un reflejo casual/inesperado
o algo que de pronto se aparece
como el pájaro cucú de los relojes
aunque no a intervalos tan inmóviles
eso eras para mí
en aquel tiempo
y en eso me basé para soñarte
para llevarte en mí/para aferrarme
a la idea de saber que estarías
tan soñándome como yo y tan perdida
como lo estaba yo en aquel entonces

3.
me gusta que sepas que me gustas
por eso te lo digo (es necesario) a cada instante
me gusta que sin ser mía vos lo seas
que me integres a tu sangre/me devores
me transformes en tu mano o en tu boca
o me dejes jugar en tu sonrisa
para luego arrojarme hacia tu escote
donde toda la ternura se hace mía
donde hasta el máximo silencio se hace estrépito
aturdiéndome los huesos y la carne

4.
mírame como lo desees pero no dejes de mirarme
mírame desnuda mientras lees o mientras hablas
mírame tras la coraza de tu ropa
o mírame mientras el sueño se desliza
por las yemas de tus dedos y tus párpados
porque solo en tus ojos soy el que soy y nunca otro
porque solo en ellos me conozco
como siempre quise conocerme

5.
y allí el río y el árbol/la ladera
el campo interminable/las ciudades
brotando como destinos absolutos
para todos los caminos y los mapas

y allí también yo y estás conmigo
y la mañana llena de colores asombrosos
y yo que te observo y reconozco
desde antes de saber que aquí estabas

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