jueves, 21 de febrero de 2008

cosas






1.
ella y su camisa abierta
(¿azul o roja? no puedo decirlo)
ella desnuda en la hierba
ella en ella y en todas ellas
es una sola ella
con su camisa abierta
desnudándose

2.
al frente
un despejado abismo sin senderos
tal vez un minotauro
pero solo por la fábula
detrás
pequeñísimos tigres
lamiendo restos de trigo en sus platos
luego
ella se recuesta sobre los escalones
marcando el ascenso
como una delicada diagonal
a la que llamo destino

3.
el día nació sobre mis ojos abiertos
ardientes ojos
abiertos
sobre el ojo el techo
y luego otro ojo y otro techo
marcando un infinito insomnio repetido
como si el acto de soñar fuera
un desperdicio

4.
la irracional fe en la maleza
el cigarro pacientemente armado
la violenta letanía del descanso
interrumpido
la línea continua entre ayer y hoy
el despropósito de saber que no se sabe
ni la maleza
ni el cigarro
ni el momento
y luego un leve sonido desde el sur
la puerta que se abre
brevemente
y ella entrando

5.
como moscas
los niños se apelotonan sobre el sol
el juego es quemar y ardiendo
abrasar los sueños de los otros
el juego es imitar el holocausto
el caer y caer sin un propósito
el subir y subir sin un destino
alejado y absorto
dejo que mis ojos recorran una a una
las distintas hogueras que aparecen
encendiendo en ellas
cigarrillos

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Tus palabras son cada día mejor. Me gustaría saber en que te inspiras mi estimado amigo.

Atte.Jose Cabrales

carmen dijo...

Son obsesivas las palabras, los sentimientos y las agonías....el símil del cigarro consumido demostrando el paso del tiempo, enciendo uno tras otro buscando un destino :) Yo también me gustaría saber quien te inspira poeta..
como siempre excelente. un abrazo